TRAUMATISMO CRANEAL
DATOS
HISTORIA
Page fue recogida por unos particulares que la encontraron flotando cerca del puerto de Palamós.
EXAMEN FÍSICO
Presentaba una fractura abierta e infectada a nivel del hueso nasal, con gran cantidad de tejido necrótico que obstruía el paso del aire, por lo que el animal respiraba por la boca. Además, se podía observar inflamación a nivel de la articulación humeroradiocubital izquierda, dolor y crepitación a la extensión-flexión. El animal estaba débil, pero la exploración neurológica fue normal, todos sus reflejos eran positivos.
DIAGNÓSTICO
Se realizó una exploración radiológica completa y se observaron una fractura abierta y profunda en el hueso nasal y una fractura cerrada completa en el radio y cúbito izquierdos, además de pérdida de la densidad ósea en la cortical del radio. Cuando la resolución de la inflamación permitió obtener radiografías de calidad, se comprobó que Page presentaba osteomielitis (inflamación del tejido óseo) en la extremidad anterior izquierda. Se ratificó el diagnóstico mediante TAC (Tomografía Axial Computerizada) y se pudo saber mediante este sistema que la infección no estaba activa en ese momento, pero más de la mitad del hueso había desaparecido a consecuencia de la misma. Además, se tomaron mediante punción-aspiración con aguja fina muestras del tejido inflamatorio de la articulación para cultivo microbiológico y saber qué bacteria estaba provocando la infección, pero no se obtuvieron resultados concluyentes. A nivel hematológico, se observó una disminución del recuento de glóbulos blancos, típico de infecciones crónicas. La bioquímica sanguínea era normal. Mediante exploración ecográfica, se pudo comprobar que Page era una hembra.
TRATAMIENTO
Hasta que empezó a comer por sí misma, tras unos 12 días desde su ingreso se le administró fluidoterapia vía intracelómica. Además, se administraron antiinflamatorios inyectables durante la primera semana de su estancia en el centro de recuperación para evitar el dolor y favorecer la exploración radiológica. Dada la gravedad de una lesión como la osteomielitis y para evitar su agravamiento, se le administró una combinación de antibióticos durante más de dos años a intervalos de varios meses, dejando una pequeña pausa entre ellos. La herida nasal se curaba cada día durante los tres primeros meses, retirando el tejido necrótico que se iba formando, para evitar que se necrosase también el hueso. Además, se rellenaba la cavidad con pomada antibiótica para favorecer la regeneración del tejido sano y se cubría con silicona, evitando así la contaminación de la misma en el tanque.
EVOLUCIÓN
La osteomielitis, que comenzó a en la aleta anterior izquierda a raíz de la fractura nasal, se extendió a todas las extremidades en un período de unos dos años e incluso dio lugar a septicemia (presencia de bacterias en sangre). La bacteria identificada en hemocultivo fue Pseudomonas fluorescens. Finalmente, acabó respondiendo favorablemente al tratamiento antibiótico y, tras una temporada de rehabilitación y ejercicios en un tanque desde su completa recuperación, pudo ser liberada 3 años después de su entrada en el centro de recuperación.
COMENTARIOS
La osteomielitis y septicemia son enfermedades muy graves que se extienden con facilidad, pudiendo incluso acabar con la vida del animal. Suelen empezar a raíz de una herida contaminada y es muy importante identificar el agente infeccioso que las produce para seleccionar el antibiótico específico para acabar con ellas.