ESTUDIO DE LAS POBLACIONES DE PARDELA CENICIENTA EN LA COSTA NORTE DE MENORCA

En la actualidad se estima que en el Mediterráneo español hay menos de 10.000 parejas, la mayoría en Baleares.

La Pardela cenicienta (Calonectris diomedea) es un ave marina que, como el resto de las especies de este grupo, está específicamente adaptada para desarrollar su ciclo vital en las duras condiciones que impone el medio marino. La consecuencia de la alta especialización de las aves marinas es que estas especies son especialmente vulnerables a la degradación de los mares. De hecho, son el grupo más amenazado a nivel mundial, incluso por encima de las aves que viven en las selvas tropicales.

A los problemas a los que ya se enfrentan en tierra – reducción del hábitat disponible para nidificación, depredación, molestias.., – se sumarán los cambios en las condiciones del mar debidos al cambio climático y, sobre todo, se espera un impacto muy negativo de la disponibilidad de alimento para estas especies, consecuencia del mismo. La Pardela cenicienta podría ser particularmente sensible a los cambios ambientales y, por lo tanto, buenos indicadores del estado de los ecosistemas.

Hay que saber que la pardela cenicienta es un ave marina que pasa la mayor parte de su vida en alta mar, donde se alimenta y descansa junto a sus congéneres, formando grupos compactos que flotan en la superficie, denominados balsas. Sin embargo, durante el periodo de reproducción, acuden a tierra firme, donde nidifican en los acantilados, realizan la puesta y crían sus pollos. Su característico ciclo vital, y su aspecto más bien discreto hacen que esta especie sea muy desconocida para la mayor parte de la sociedad. La pardela cenicienta está catalogada como vulnerable en Europa y podría encontrarse en Peligro de Extinción en el Mediterráneo.

En la actualidad se estima que en el Mediterráneo español hay menos de 10.000 parejas, la mayoría en Baleares. Para poder realizar una estima de la evolución de sus poblaciones que permita detectar un cambio negativo para esta especie es necesario contar con unos buenos censos de partida, conocer todos los lugares de cría y mantener esta información permanentemente actualizada.

Este conocimiento básico es especialmente complicado de obtener para la Pardela cenicienta, porque nidifica en colonias de muy difícil acceso: acantilados, islotes rocosos… Un caso excepcionalmente difícil para trabajar es de la costa norte de Menorca.

El Vell Marí dentro del programa de la Obra Social de la Caixa “la Caixa a favor del mar: la ruta del Vell Marí” ha dedicado una campaña específica al aporte de datos sobre la nidificación de esta especie en la costa norte de Menorca donde la especie cuenta con una de las tres principales colonias del Mediterráneo, junto a la de las islas de Cabrera y de Chafarinas. Allí, se ha realizado un estudio de la población nidificante en el noroeste de la isla para actualizar los datos aportados por el último censo que se realizó 17 años atrás.

Los resultados que se han obtenido de los censos nocturnos mediante escucha, en las localizaciones señaladas por los expertos, se han sumado a los censos específicos que se han venido realizando en los últimos años. Así se pretende prever cambios en las poblaciones de esta especie amenazada y protegida por la UE con la antelación suficiente como para poder tomar medidas de protección eficaces.

Tras realizar una primera prospección de las paredes de los acantilados desde el mar, un registro fotográfico y una selección de los sectores más adecuados para albergar núcleos reproductores, se procedió durante escuchas nocturnas consecutivas, a contabilizar las vocalizaciones de las parejas nidificantes en cada uno de los puntos escogidos para poder estimar de forma aproximada el número de parejas existentes.

Los primeros resultados no son optimistas. Respecto a la última estimación, todo indica que la población nidificante de Menorca ha disminuido sensiblemente, seguramente como consecuencia de la continua depredación de los nidos por parte de rapaces nocturnas, gaviotas y mamíferos introducidos como ratas, gatos y cabras, molestias ocasionadas en las colonias y a la mortalidad en artes de pesca, además de a la pérdida y alteración de su hábitat.

Localización: costa norte de Menorca

Fecha realización: del 28 julio al 3 de agosto

Administración, científicos y expertos:

  • Joan Mayol, Jefe del Servicio de Protección de Especies. Dirección General de Caza, Protección de Especies y Educación Ambiental del Govern de las Islas Baleares.
  • Carles Carboneras, ornitólogo marino e investigador. Colaborador de BirdLife International.
  • Miguel McMinn y Ana Rodríguez (SKUA S.L). Especialistas en el seguimiento de aves marinas y colaboradores habituales de la DGCAPEA.
  • Con la participación de la Dirección General de la Mar de la Consejería de Medio Ambiente del Govern de las Islas Baleares.