FONDOS MARINOS
Muchos de los organismos marinos viven anclados al fondo, pero la disputa para encontrar un lugar estable en el que aferrarse es feroz y no existe superficie en el fondo del mar en la que no encontremos vida. La grandísima variedad de lugares en los que asentarse, así como la oscilante temperatura del agua, la profundidad, el oleaje o la luminosidad provocan que en las profundidades del mar coexista una gran variedad de indispensables ecosistemas.
En los primeros metros de agua, e incluso en la zona intermareal (entre mareas), suelen dominar en el fondo marino comunidades de algas y plantas marinas. De la misma forma que los bosques, su presencia es de vital importancia ya que son una importante fuente de oxígeno y alimento, además de zonas de cría y escondite para muchas especies animales.
A medida que la luz disminuye la proporción entre plantas y animales se va invirtiendo hasta llegar a las profundidades marinas y cuevas, donde la luz escasea y la variedad de especies, colores y formas de animales alcanzan su máxima plenitud. En estas zonas predominan los invertebrados (esponjas, corales, artrópodos…) organismos poco conocidos pero de una diversidad tan elevada como su singularidad.
La explotación de los recursos marinos, así como la contaminación, los métodos de pesca agresivos con el fondo o el anclaje y construcción de puertos están provocando la degradación e incluso destrucción de muchos hábitats de vital importancia.